Los profesores cristianos también hacen campaña contra la Ley Wert

V. M. (El Boletín)

El colectivo de ‘Profesores Cristianos de la Escuela Pública’ tampoco está de acuerdo con la Ley de Mejora de la Calidad Educativa impulsada por José Ignacio Wert. Así de claro lo han dejado estos docentes a través de las redes sociales, donde han iniciado una campaña contra la reforma. Entre sus planes se encuentra la elaboración de un manifiesto crítico que ponga de manifiesto que no todos los católicos aplauden la norma del Gobierno.

La primera acción que desarrollarán los profesores cristianos en el marco de esta campaña se llevará a cabo el sábado 25 de mayo en la parroquia Santa María del Buen Aire de Madrid. El colectivo se reunirá en esta iglesia a partir de las 11:30h para “consensuar un texto crítico con la LOMCE”, un manifiesto en el que quede claro que en el cristianismo también hay posturas “acordes con la denuncia de leyes que generan injusticia y desigualdad social”.

Asimismo, este colectivo incluirá entre sus críticas a la Iglesia, ya que dicen que la institución ha dado su “beneplácito” a la norma porque satisface sus intereses: reforzar la enseñanza concertada, dar más relevancia a la asignatura de Religión y eliminar “ciertas cuestiones curriculares que atentan contra su propia ideología conservadora”, como Educación para la Ciudadanía.

“Creemos que desde los colectivos y comunidades de la Iglesia que estamos en desacuerdo con esta Ley debemos manifestar con claridad y hacer pública nuestra opinión al respecto, y así ofrecer otras visiones”, señalan estos docentes en su página web.

Unas críticas contra el PP que no son nuevas, ya que los profesores cristianos ya se movilizaron contra los recortes educativos acometidos por la Comunidad de Madrid en 2011, cuando surgió la Marea Verde. Concretamente, estos docentes organizaron diversas oraciones colectivas reivindicando los valores que representa la enseñanza pública, universal y gratuita, e incluso acudieron al Arzobispado de Madrid para entregar una carta a Rouco Varela en la que pedían su mediación ante la consejera de Educación, Lucía Figar, para solucionar el conflicto entre profesores y Gobierno regional.